Each Child is a Gift | Cada niño es un regalo

Judges 13:2-7, 24-25a; Luke 1:5-25

We live in an age when people in many countries have access to contraceptives and abortion and children can be viewed as a lifestyle choice or accessory.  It may be hard to conceive of a world in which children, especially boys, are considered signs of God’s favor and security for old age.  But that was the world of the Bible, and it remains the reality in many parts of the world today.  This, too, can have tragic consequences and lead to everything from infanticide to the neglect or even hostility to education for girls.

In the biblical world, the world of Manoah and his (unnamed) wife and Zechariah and Elizabeth—the inability to have children to have children was considered a tragedy and a curse.  Patriarchy and an incomplete understanding of biology placed the burden on the woman and her “barrenness.”  The stigma applied even to those who were otherwise considered righteous.

Today’s readings feature a common biblical motif: childless couples are miraculously rewarded with sons who are destined to do great things. They are chosen by God for a purpose in the economy of salvation. Samson was a great hero who defended his fellow Israelites against their enemies, the Philistines. John the Baptist prepared the way for Jesus the Christ.

Each child is a gift, and God has a purpose for every person who is born. Let’s pray for all couples struggling to conceive or adopt children, those who face difficult decisions about whether to have children, and those who are anxious about caring for the children they have. –jc

---------------------------------------------------------------------------------------------------------------------

19 de diciembre de 2020

Sábado de la 3ª semana de Adviento

Jueces 13:2-7, 24-25a; Lucas 1:5-25

Vivimos en una época en la que la gente en muchos países tiene acceso a los anticonceptivos y al aborto, y los niños pueden ser vistos como una opción de estilo de vida o un accesorio.  Puede ser difícil concebir un mundo en el que los niños, especialmente los varones, se consideren signos del favor y la seguridad de Dios para la vejez.  Pero ese fue el mundo de la Biblia, y sigue siendo la realidad en muchas partes del mundo hoy en día.  Esto también puede tener consecuencias trágicas y llevar a todo, desde el infanticidio hasta el abandono o incluso la hostilidad a la educación de las niñas.

En el mundo bíblico, el mundo de Manoa y su (sin nombre) esposa y Zacarías y Elizabeth - la incapacidad de tener hijos para tener hijos fue considerada una tragedia y una maldición.  El patriarcado y una comprensión incompleta de la biología pusieron la carga sobre la mujer y su "esterilidad".  El estigma se aplicaba incluso a aquellos que de otra manera eran considerados justos.

Las lecturas de hoy presentan un motivo bíblico común: las parejas sin hijos son milagrosamente recompensadas con hijos que están destinados a hacer grandes cosas.  Son elegidos por Dios para un propósito en la economía de la salvación.  Sansón fue un gran héroe que defendió a sus compañeros israelitas contra sus enemigos, los filisteos.  Juan el Bautista preparó el camino para Jesús el Cristo.

Cada niño es un regalo, y Dios tiene un propósito para cada persona que nace.  Oremos por todas las parejas que luchan por concebir o adoptar hijos, los que se enfrentan a decisiones difíciles sobre si tener hijos, y los que están ansiosos por cuidar de los hijos que tienen. -jc