Hope and Security | Esperanza y Seguridad

St. Andrew Dũng-Lac and Companions
Daniel 5:1-6, 13-14, 16-17, 23-28; Luke 21:12-19

Where do we find our hope and security? That’s the central question asked and answered in today’s scripture readings as well as the lives of the saints we remember.

King Belshazzar of Babylon found his hope and security in his earthly power, wealth, and idols. When he used the sacred vessels that his ancestors had taken from the temple in Jerusalem and used them as common cups for a party he was throwing, God gave him a vision that shook him with fear. Daniel revealed the meaning of that vision: God found Belshazzar’s leadership wanting, and his kingdom would soon end and be divided between the Medes and Persians.

Jesus urged his disciples to put their hope and trust in God, especially in moments of crisis, persecution, and even opposition and betrayal by those closest to them. He promised: “I myself shall give you a wisdom in speaking that all your adversaries will be powerless to resist or refute.” He added, “By your perseverance you will secure your lives.”

St. Andrew Dũng-Lac and the other martyrs of Vietnam believed the Lord’s promises. What they lost on earth they more than gained in heaven. They surely experienced moments of doubt, fear, and sadness, but they remained true to the gospel and their profession of faith. Suffering stood before them, but so did salvation. The writing was on the wall. - jc

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San Andrés Dũng-Lac y compañeros
Daniel 5,1-6, 13-14, 16-17, 23-28; Lucas 21,12-19

¿Dónde encontramos nuestra esperanza y seguridad? Esa es la pregunta central que se plantea y se responde en las lecturas de las escrituras de hoy, así como en las vidas de los santos que recordamos.

El rey Belsasar de Babilonia encontró su esperanza y seguridad en su poder terrenal, su riqueza y sus ídolos. Cuando utilizó los vasos sagrados que sus antepasados habían sacado del templo de Jerusalén y los usó como vasos comunes para una fiesta que estaba organizando, Dios le dio una visión que lo sacudió de miedo. Daniel reveló el significado de esa visión: Dios consideró que el liderazgo de Belsasar era deficiente, y que su reino pronto terminaría y sería dividido entre los medos y los persas.

Jesús instó a sus discípulos a poner su esperanza y confianza en Dios, especialmente en los momentos de crisis, persecución e incluso de oposición y traición por parte de los más cercanos. Lo prometió: "Yo mismo os daré una sabiduría al hablar que todos vuestros adversarios no podrán resistir ni refutar". Y añadió: "Con vuestra perseverancia aseguraréis vuestras vidas".

San Andrés Dũng-Lac y los demás mártires de Vietnam creyeron en las promesas del Señor. Lo que perdieron en la tierra lo ganaron con creces en el cielo. Seguramente experimentaron momentos de duda, miedo y tristeza, pero se mantuvieron fieles al Evangelio y a su profesión de fe. El sufrimiento estaba ante ellos, pero también la salvación. La escritura estaba en la pared. - jc