The Power of One | El Poder de Uno

St. Matthew
Ephesians 4:1-7, 11-13; Matthew 9:9-13

When I was in kindergarten and first grade, one seemed like a small number. It was next to zero on the number line—next to nothing. Then I learned the power of one. It was essential to every prime number: 3, 5, 7, 11, 13, etc. Learning about fractions and decimals made me realize that one was more complex than I thought. Many years later, I discovered that ones and zeros were a driving force in the computer age.

Jesus appreciated the value of one. While he preached and worked many miracles in front of crowds, much of his ministry was marked by one-on-one encounters. His meeting Matthew the tax collector not only led to Matthew’s conversion but was also emblematic of his outreach to those who were marginalized. In response to the Lord’s grace and encouragement, Matthew became an apostle and evangelist who would move future generations to become missionary disciples in the church.

Today’s passage from St. Paul’s Letter to the Ephesians features a litany of ones: “one Body and one Spirit…one hope…one Lord, one faith, one baptism; one God and Father of all….” Though God has blessed the church with many ministries, they share one purpose: to build up the one Body of Christ.

Never underestimate the power of one. - jc

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San Mateo
Efesios 4:1-7, 11-13; Mateo 9:9-13

Cuando estaba en el jardín de infantes y en primer grado, el uno parecía un número pequeño. Estaba al lado del cero en la línea numérica, al lado de nada. Luego aprendí el poder del uno. Era esencial para todos los números primos: 3, 5, 7, 11, 13, etc. El aprendizaje de las fracciones y los decimales me hizo ver que el uno era más complejo de lo que pensaba. Muchos años después, descubrí que los unos y los ceros eran una fuerza motriz en la era de la informática.

Jesús apreciaba el valor del uno. Aunque predicó y realizó muchos milagros ante multitudes, gran parte de su ministerio estuvo marcado por los encuentros individuals. Su encuentro con Mateo, el recaudador de impuestos, no sólo condujo a la conversión de Mateo, sino que también fue emblemático de su alcance a los marginados. En respuesta a la gracia y el estímulo del Señor, Mateo se convirtió en un apóstol y evangelista que movería a las futuras generaciones a ser discípulos misioneros en la iglesia.

El pasaje de hoy de la Carta de San Pablo a los Efesios presenta una letanía de unos: "un solo Cuerpo y un solo Espíritu... una sola esperanza... un solo Señor, una sola fe, un solo bautismo; un solo Dios y Padre de todos...." Aunque Dios ha bendecido a la iglesia con muchos ministerios, éstos comparten un propósito: edificar el único Cuerpo de Cristo. 

Nunca subestimes el poder de uno. - jc