The true fulfillment center | El verdadero centro de cumplimiento

Memorial of St. Raymond of Penyafort

1 John 4:19-5:9; Luke 4:14-22

We’re familiar with what a “fulfillment center” is.  It’s another name for a large warehouse filled with all the stuff we’re buying online these days.  They’re beehives of activity and one of the places people can still find work.

But fulfillment centers are not always happy or fulfilling places, especially for workers.  They can be filled with anxiety, frustration, stress, and sickness. 

A sense of fulfillment—peace, joy, purpose, meaning, and belonging—is something we all desire. Today’s scripture readings direct our attention to where we can look for fulfillment.  John tells us that we can find it in love and obeying God’s commands.  When we love and live according to God’s will, we fulfill the purpose for which we were created.  When that happens, joy and peace will flow naturally.

In our gospel reading, Jesus boldly proclaims that he is the source of our fulfillment.  In following him, we follow the one who showed us how to love and fulfill the will of God.  He fulfilled the hopes of the prophets and the needs of all who needed healing and liberation. 

The true fulfillment center is in any heart where Christ lives and loves. jc

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7 de enero de 2021

Memoria de San Raimundo de Penyafort

1 Juan 4:19-5:9; Lucas 4:14-22

Estamos familiarizados con lo que es un "centro de cumplimiento".  Es otro nombre para un gran almacén lleno de todas las cosas que compramos en línea en estos días.  Son colmenas de actividad y uno de los lugares donde la gente todavía puede encontrar trabajo.

Pero los centros de cumplimiento no siempre son lugares felices o satisfactorios, especialmente para los trabajadores.  Pueden estar llenos de ansiedad, frustración, estrés y enfermedad. 

Un sentido de realización - paz, alegría, propósito, significado y pertenencia - es algo que todos deseamos. Las lecturas de las escrituras de hoy dirigen nuestra atención hacia donde podemos buscar la satisfacción.  Juan nos dice que podemos encontrarlo en el amor y en la obediencia a los mandatos de Dios.  Cuando amamos y vivimos de acuerdo a la voluntad de Dios, cumplimos el propósito para el que fuimos creados.  Cuando eso sucede, la alegría y la paz fluirán naturalmente.

En nuestra lectura del evangelio, Jesús proclama audazmente que él es la fuente de nuestra realización.  Al seguirlo, seguimos a quien nos mostró cómo amar y cumplir la voluntad de Dios.  Él cumplió las esperanzas de los profetas y las necesidades de todos los que necesitaban sanación y liberación. 

El verdadero centro de cumplimiento está en cualquier corazón donde Cristo vive y ama. jc